
Gracias a Alemania, motor económico de Europa, la crisis en España ha finalizado, ya no hay que preocuparse por la subida de los combustibles, todo el mundo podrá pagar las hipotecas y la economía se volverá a reactivar como en la mejor época del ladrillo... y todo gracias a unos chavales que, en representación de España, le pegaban pataditas a una pelota frente a unos señores que representaban a Alemania. Así pues, y todos los medios dejarán constancia de ello, podemos afirmar que se ha acabado la crisis, al menos durante dos o tres semanas, mientras dure la euforia.